Nunca pensó que acabaría poniéndole los cuernos a su mujer, y mucho menos con la niñera de sus hijos, porque le parecía un tópico de cojones. Pero la chica rubia que empezó a cuidar de los chicos le llamó la atención desde el principio; y un día, sin querer, se percató de que la niñera en realidad era una transexual. Joder, eso fue algo que empezó a obsesionarle, hasta que ya no podía vivir sin follarse a ese guapa shemale. Así empezó una aventura con la canguro, a espaldas de su mujer, por supuesto; de hecho, rezaba para que no se enterara, ni siquiera por que quisiera despedir a la puta tranny y lo dejara sin amante.