Nunca un aparato para hacer ejercicio ha dado tanto de sí como esta máquina de pilates, que a la vez se ha convertido en una máquina sexual. Y eso que dicen que el pilates es para mujeres, aunque claro, si tenemos en cuenta que eso es esa entrenadora, una mujer con polla, quizá lo entendamos mejor. Ella ha puesto a su pupilo en la posición más extraña para comprobar su elasticidad, y la dilatación de su culo, ya que estaba. Y por cómo lo enculaba, se ve que ambas estaban bastante bien, en estado óptimo para esta follada transexual.