Hace tiempo que a este gay, aparte de los hombres, le gusta mucho vestirse de mujer, lo que puede ser un poco extraño para sus posibles parejas, encontrarse de pronto con un marica que además es un travesti. Pero parece que a su nuevo novio no le importa, es más, parece que le encanta, porque cuando estos días lo ve vestido de mujer sexy con brillos y lentejuelas, eso lo pone muy caliente. Y es que también el sexo gay necesita a veces de ciertos estímulos para salir de la rutina, y está claro que el usar prendas femeninas es un aliciente original y muy eficaz.