O este hombre venía para travesti sumiso, o tiene la paciencia de un santo, que viendo la cara de pervertida que tiene su gorda esposa, no me extrañaría nada. A saber qué trato tienen entre ellos para tener esta clase de vida marital, no se entiende que el hombre acepte tan tranquilamente el ser su esclavo en la cama, literalmente. Se ve que a la señora le gusta el bondage, el sexo duro, la humillación… y cualquier práctica extrema que tenga que ver con el sexo. Y eso sin hablar de su travestismo, que quizá también sea cosa de ella. Pero que nadie se equivoque, para parece que el tío anda súper satisfecho de que su mujer le destroce el culo así.