Como si el ser un tio vestido de mujer no fuera ya bastante fetiche, este travelo y su novio ahora juegan con trajes de látex a follarse el culo uno al otro. Bueno, en realidad está bastante claro que el vestido con ropas femeninas lleva la voz cantante, aunque sea el tipo del arnés el que parece encargado de las penetraciones anales. Quizá sea una cuestión de turno, o simplemente a esta loca travesti se le ha ocurrido hoy ese juego, porque su novio no parece muy entusiasmado… aunque debajo de esa máscara puede estar extasiado de gusto, y con su verdadera polla a punto de correrse.