Menudo calentón que tenían estas dos trannys brasileñas, estaban cachondas a más no poder. En cuanto entraron en el dormitorio solo pensaron en llevarse sus vergas a la boca, y hacerse excitantes felaciones. Después, con sus pollas empalmadas y listas para penetraciones, se jodieron los culos a base de bien, aprovechando que son dos zorras calientes y viciosas. Y después, como si se hubieran puesto de acuerdo y les gustaran las mismas prácticas sexuales, le tocó el turno a las pajas. Hay veces en que se masturban la una a la otra, pero hoy han decidido hacerlo colocándose juntas y dándole cada una a su rabo la atención debida hasta correrse.