Supongo que este tio vestido de travesti debe estar alucinando ahora mismo, y no sólo de placer, sino de puro asombro; dudo mucho que hace unos años, él pensara que se iba a montar un trÃo con hombres, que uno de ello iba a ser un negro de enorme tranca, y que para más inri él mismo iba a estar vestido de mujer. Pero el destino le sorprende a uno y… bueno, también el vicio y el gusto por probar cosas nuevas en el sexo, aunque el porno travesti no fuera algo que estuviera en sus planes en aquellos momentos.